Satánico

Cuando divisé el puerto corrí hacia la luz cegadora. Los verdes pinos eran cálidos como un nogal en un atardecer de medio Sol. El puente del agua cristalina era sólido, tanto que me recordaba al amor fraternal... ¿Odias tener que naufragar? El buque era magnífico y tenebroso; cada vez, estaba más y más lejos. Las estrellas paseaban a mi espalda para acompañarme, todo había acabado, ya no estaba. La luz de mi corazón ha escapado: ahora estoy solo y desamparado en un lugar que no conozco. El fondo de la mar... Satánico lugar...